Esta semana traemos un blog de gran altura y hablamos de los miradores del Cañón del Río Lobos. Algunos muy conocidos y transitados, otros reformados o de reciente creación y algunos probablemente nuevos para el lector. Sacad vuestra agenda y apuntad vuestra lista de prioridades.
Mirador de Costalago
Como bien sabéis, este parque natural no sólo pertenece a Soria sino que comienza su andadura en el sureste de Burgos donde nace el río Lobos. Así pues nos desplazamos hasta la provincia vecina para empezar el recorrido.
Podremos acceder por 2 vías diferentes.
La primera y más directa desde Hontoria del Pinar, término municipal al que pertenece. Para ello iremos hasta la altura del ayuntamiento aproximadamente, a la izquierda de la N234, y seguiremos las calles de la localidad en su cuesta abajo hasta encontrar los paneles indicadores.
La segunda nos lleva por la vía que une San Leonardo de Yagüe con Peñaranda de Duero, concretamente desviándonos por la carretera que une el pueblo de Muñecas con el de Orillares (SO-P-5111). Cogeremos un camino forestal situado en la parte derecha de la vía en dirección a Hontoria del Pinar. No está señalizado como tal, así que usaremos como distintivo un antiguo cartel de “Peligro de incendios”. Durante el trayecto nos acompañarán los baches, pero el camino se puede recorrer en coche. Además, podremos disfrutar de vacas, toros y caballos pastando.
Una vez arriba, tenemos un banco y un panel informativo sobre la zona. Lo que la vista nos regala es una bonita panorámica del valle de Costalago. Asimismo, es posible ver sus animales, las elevaciones y masas boscosas que se levantan en rumbo sur e incluso el Sistema Central en días claros.
Mirador de la Lastrilla
Situado ya en la provincia de Soria junto a la frontera burgalesa, podemos llegar a nuestro siguiente destino yendo hasta San Leonardo de Yagüe y cogiendo el desvío a Santa María de las Hoyas. Llegaremos tras pasar el Puente de los 7 ojos y subir la serpenteante cuesta del cañón. Está aproximadamente en el punto kilométrico 8 a la derecha. Hay una pequeña explanada de tierra para estacionar vehículos y un pequeño letrero que nos indica que si culminamos la pequeña loma que tenemos frente a nosotros llegaremos hasta el punto exacto. En la pequeña cima nos espera otro panel informativo para explicarnos lo que nuestra mirada alcanza.
Así pues, veremos la amplia Dehesa del Boyal y el macizo burgalés que viene desde Costalago, entre otros. Además, podremos apreciar el importante cambio paisajístico que se da por estas latitudes. Si miramos hacia el norte observaremos la zona boscosa de Pinares con la Cordillera Ibérica al fondo. Si dirigimos nuestros ojos al sur dejamos la zona montañosa para acercarnos a las inmediaciones del Duero y sus campos de cultivo.
Mirador de Santa María de las Hoyas
Cuenta apenas con un año de vida y en él han sido recicladas algunas de las barandillas antiguas del nuevo mirador de la Galiana. Lo hallamos muy cerca del anterior destino. El trayecto a recorrer es el mismo, pero hemos de coger un desvío a la izquierda justo al culminar el ascenso de la subida desde el Puente de los 7 ojos. No está indicado todavía y la pista para llegar no es especialmente buena para cualquier tipo de turismo pues abundan los cantos sueltos.
Mirador de Las Gullurías
Esta ruta no es posible hacerla en coche, así que el senderismo o la bicicleta son las mejores opciones. El punto de partida es el aparcamiento de la Casa del Parque del Cañón del Río Lobos donde debemos seguir las indicaciones de los carteles. Durante la ascensión por un sendero de tierra, si volvemos la vista atrás, podremos contemplar el imponente castillo de Ucero. Tampoco faltan las colmenas y las caleras. Posteriormente viene el páramo de El Esplegar y tras unas cuantas subidas y bajadas sale un camino a la derecha que nos lleva hasta nuestra meta bien indicada.
Ante nuestros ojos se abre ya la parte más ancha del Cañón y vemos la parte soriana y burgalesa de Pinares, con el Sistema Ibérico al fondo. Como curiosidad comentamos que dicho mirador forma parte de una amena ruta circular conocida como la Senda de las Gullurías. Un recorrido de aproximadamente 10 km. que después nos llevaría hasta la ermita de San Bartolo y la Cueva Grande.
Ojo o Balconcillo del Diablo
Ya que estamos muy cerca si seguimos la Senda de las Gullurías, nos acercamos hasta este lugar de impactantes vistas también. Está situado junto a la ermita de San Bartolo. Hemos de subir por la parte izquierda del templo hasta esta curiosa oquedad abierta en la roca que forma una ventana natural. Para nosotros uno de los miradores del Cañón del Río Lobos con más magia por ofrecernos una panorámica a gran nivel justo en pleno corazón del parque.
Desde aquí vislumbramos la parte norte de la Senda del Río. Por delante una espectacular panorámica: la Cueva Grande, la ermita, el río y la parte final del Parque Natural.
Mirador del castillo de Ucero
A él podemos ascender también desde la Casa del Parque del Cañón del Río Lobos en otra amena ruta circular que además nos llevará hasta el casco urbano de Ucero y el curioso acueducto romano de la Cueva de la Zorra. Desde allí se contempla la desembocadura del río Lobos en el nacimiento del río Ucero y su confluencia con el río Chico.
Mirador de La Galiana
Terminamos en el más conocido y más accesible de todos ya que se encuentra junto a la carretera que une Ucero con San Leonardo de Yagüe (SO-920). Para mayor comodidad tenemos aparcamientos asfaltados a ambos lados de la vía. Desde aquí podremos contemplar la parte final y más espectacular del Parque Natural.
Uno de los mayores alicientes para acercarse aunque ya lo conozcas es su reciente remodelación. Perfecto para personas con movilidad reducida y con volados que dejarán tus pies sobre el acantilado, no está exento de polémicas por su posible impacto en el ambiente.
A nuestra espalda queda la zona de Pinares y frente a nosotros, desde la zona más meridional observaremos la comarca de Tierras del Burgo. También el Sistema Central a lo lejos y el castillo de Ucero. Además, es muy frecuente que en gran parte de los miradores que hemos recorrido estemos acompañados por el vuelo de los buitres leonados que anidan en los farallones del lugar.
¿Quieres conocer un poco más sobre él? No te pierdas este blog.
