¿Sabíais que todo el entorno del Cañón del Río Lobos está plagado de simas y cavidades espectaculares como el Torcajón de Casarejos? Muy pronto os desvelaremos como es pasar una amena jornada por este afamado Parque Natural cercano, pero hoy nos quedamos en uno de los muchos destinos que son objeto de los amantes de la espeleología. Dedicamos nuestro blog a este misterio de la madre tierra cada vez más frecuentado.
Características del Torcajón
Este considerable agujero perdido y hallado en medio del pinar puede no ser el más grande del Cañón del Río Lobos, pero sus generosas dimensiones lo convierten en uno de los más llamativos. Tiene una profundidad de 45 metros. A medida que nos acercamos, su tremenda boca llama la atención. Son más de 30 metros de largo por unos 8 de ancho los que nos reciben.
En su descenso hacia la oscuridad sus paredes se visten del intenso color verde de plantas trepadoras confiriendo un aspecto precioso. Como todo este tipo de fenómenos naturales, despierta gran curiosidad en el visitante al mismo tiempo que recelo a la hora de asomarse al abismo. Por suerte, una buena parte de su contorno está rodeado por una valla de madera para mayor seguridad.
Si hemos despertado tu curiosidad con este lugar te explicamos detalladamente a continuación.
Cómo llegar
Ponemos rumbo hacia el municipio de Casarejos situado a unos 14 kilómetros. Al llegar, tomaremos el desvío en dirección a El Burgo de Osma. Unos 400 metros después debemos tomar un cruce a la derecha. Se trata de una pista forestal apta para el tránsito de cualquier tipo de vehículo. Es bastante fácil llegar hasta esta sima ya que no abandonaremos el camino principal. Primero llegamos a un pequeño refugio donde los lugareños acuden a merendar conocido como el Casetón.
Ahí encontramos la primera señal que nos guiará (El Torcajón – Las Taínas). Unos metros más adelante hay un cruce, ignoramos el camino de la derecha y seguimos por la izquierda. Poco después hay otra bifurcación hacia la izquierda, en este caso nosotros seguimos a la derecha. Aunque pueda parecer lioso no os preocupéis, la señalización que hay para los senderistas sirve de gran ayuda. Únicamente tenemos que seguir aquellas balizas con dos rallas paralelas. Los caminos que no nos interesan contienen una cruz como indican las imágenes.
Ya estamos cerca, veremos un cartel del Parque Natural del Cañón del Río Lobos y continuaremos a la izquierda. En seguida veremos de nuevo un camino a la izquierda con un cartel en el que se indica la torca.
Han sido solamente 3,4 kilómetros de trayecto hasta allí desde que dejamos la carretera SO-920 y ya podemos admirar la majestuosidad de nuestra propuesta de hoy.
Si queréis, de regreso a nuestro hotel, podéis completar la expedición con la sima de Las Taínas, de menor tamaño, pero también llamativa y próxima al camino del Torcajón.
¡Este ha sido el trayecto de hoy! Pronto volveremos con nuevas curiosidades y sitios para visitar desde El Cielo de Muriel.